Encantado de cruzar caminos contigo. 
Mi nombre es Luca, y elijo presentarme desde un lugar más profundo, más humano. 
No soy médico, ni psicólogo, ni gurú espiritual. No vengo a ofrecerte fórmulas mágicas ni atajos para la felicidad. 
Soy, simplemente, un buscador. Alguien que ha transitado los abismos y las cumbres de la existencia, y que ha hecho de su experiencia un mapa para acompañar a otros en su propio viaje de transformación. Mas que un coach me gusta considerarme un mentor de vida saludable. 
Desde muy joven, el deporte fue mi primer maestro. El tenis y las artes marciales me enseñaron sobre disciplina, constancia y superación. Pero pronto entendí que los combates más desafiantes no suceden en los tatamis, sino dentro de uno mismo. 
A los 21 años emprendí un viaje sin retorno: me lancé al mundo en busca de sentido. 

Crucé los cinco continentes, y en cada cultura, en cada encuentro, fui dejando pedazos de lo que no era, para encontrar lo que sí soy. 
A los 23 comencé a liderar equipos en el ámbito profesional. Lo que inició como gestión de personas se transformó en una exploración del alma humana. Aprendí que liderar no es mandar, es inspirar, servir y acompañar procesos de expansión personal. 
Descubrí que una energía luminosa y auténtica puede despertar la mejor versión en los demás, y que el verdadero propósito de un líder es sembrar conciencia, propósito y amor propio. 
Hoy, después de décadas de camino, mi liderazgo ya no responde a estructuras empresariales: es una misión de vida. 
Ayudar a otros a despertar, a liberarse de condicionamientos, a reconectar con su esencia y a vivir una vida con sentido, alegría y paz. 

Porque sí es posible vivir mejor de lo que jamás imaginaste. Solo necesitas una guía, una comunidad y el valor de empezar. 
Mi mayor renacer llegó a los 35 años, al llegar a Mallorca. 
 No sabía que esa tierra mágica me recibiría para deshacerme por completo y volver a reconstruirme desde cero. 
La pandemia fue mi gran maestro, el catalizador de un reset profundo.